7 toxicomanías musicales

de Leo Choque (la lista es mía, los vicios no todos.)

Como ya sabrán ustedes, mis más leales fans, no soy un tipo que quiera incurrir en simplistas y académicos clichés, eso sí siempre respetando la canónica formación que recibí en mis tiernos años de existencia.

Dicho esto, es momento de las drogas. Un compilado decente (más siempre decadente) de canciones sobre diferentes tipos de materiales adictivos que no sean los que la radio ya te metió hasta el níspero o re teorizar por quincuagésima novena vez sobre si Lucy es una niña de Kinder o una fumadaza astral.

7) WAITIN’ FOR MY MAN – VELVET UNDERGROUND (THE VELVET UNDERGROUND & NICO, 1967)

No entiendo por qué no puede ser tan práctico. Quedar en una hora, llegar puntualmente, efectuar el trueque. Pero con los dealers nunca serán así. Poseen meridianos especiales que atraviesan precisamente por medio de sus mentalidades de emprendedor del mercado negro. A nosotros nada más nos queda elegir una buena lista para cuando llegue el momento de esperarlo…

Este platanal disco, de inicio a fin y casi como concepto oculto, me suena como al verdadero soundtrack de un domingo. Paz al despertar, luego ganas de sacar, para acallar las ansias producidas por una perrita, luego estás por allá arriba, luego paranoico, finalmente melancólico para dar paso al limbo de la madrugada.

Tener una banda equivale a tener un secretario que saque por ti. El trámite resuelto.

6) ¿QUIÉN SE HA TOMADO TODO EL VINO? – LA MONA JIMENEZ (EL BAILARÍN, 1994)

Las personas tendemos a dejar de considerar el alcohol como una droga, sabiendo que es una de las más potentes. El nivel de tolerancia que te puede generar puede llegar a ser tan bajo que vas a estar golpeando la puerta del grifo por más. Son muchísimo más que recurrentes las veces que nos hemos encontrado con una gran cantidad de energía a las cinco de la mañana, pero nadie que pueda expender licor a tan ambigua hora. ¿Qué pasó, ya no queda nada de trago? No, te lo chupaste todito, ahí está pue por atolondrado.

Sin duda, un tipo que merece toda nuestra admiración.

5) 10 CRACK COMMANDMENTS – THE NOTORIOUS B.I.G. (LIFE AFTER DEATH, 1997)

Mothafaca. El estupendo y sentido Biggie nos trae una aproximación muy curtida sobre la vida en el negocio del crack, o más bien, el manual básico para no terminar mutilado en distintos puntos de Brooklyn y dejar a tu viuda con la casa sembrada.

4) I WANT A NEW DRUG, HUEY LEWIS AND THE NEWS (SPORTS, 1984)

Algo nuevo, no tan minimalista como una micropepa, porfa.

3) MESHKALINA – TRAFFIC SOUND (VIRGIN, 1969)

Parece que el tal Yahuar Huaca fue el primer antepasado que se fue de viaje en un bote hecho de epifanías personales a través del mar cósmico. Sin duda, considerando la futura violación de brujas y genocidio de otras culturas, corroboramos que fue también el primero al que le dio la pálida. Seguro estaba mezclando con chicha de jora y lo golpeó el vientito, ta que… Obra relacionada al tema: Estados Alterados (Film), Puertas de la Percepción (Huxley), The Electric Kool Aid Acid Test (Wolfe)

Más que convencido que así nació la teorética en pos del viaje en el tiempo.

2) HEROÍNA – SUMO (LLEGANDO LOS MONOS, 1986)

¿Tributo o canción sentida? ¿Qué tan culpables son las mujeres en nuestras más inmundas recaídas? ¿Me siento bien pinchándome “en paz” cada domingo solitario? ¿Le vas más a una europea que a una latina? Estas y otras cuestiones se desprenden de esta blusera canción de Sumo. Soltá tu pelo con Wellapon…

Por lo menos llega a tu covacha, loco.

1) FEEL GOOD HIT OF THE SUMMER – QUEENS OF THE STONE AGE (RATED R, 2000)

¡Pero por supuesto! Este increíble y potente tema sin duda es un gran ejemplo de cómo una canción sobre drogas no debe ser imperativamente un tributo meloso o una metáfora escondida entre letras encrucijadas. Esta es amigos, una mera yuxtaposición de ciertas sustancias que conforman una letra directa y entrañable. Para unos no es más que una enumeración, para otros es la lista de compras semanal.

¿Querías tu “hit” del verano? TOMA.