Hoy estoy con unas ganas tremendas de hacer una fiesta. En realidad no tengo ningún motivo o excusa para celebrar, pero quiero cagarla. Y no basta con contratar... digo, traer hembritas conocidas y surtirnos hasta el cuello de ron, charol y cantidades industriales de helado Peziduri de menta para la bajona. Tiene que haber también un soundtrack digno para festejar por todo lo alto, con calidad y sin que algún desubicado o desubicada haga la clásica pregunta de medianoche ¿Por qué no ponemos algo más movido? ¡"Movido", mis bolas! Estas son verdaderas canciones para festejar como se debe. Hazme caso nomás y si gustas unirte a mi parranda, pues acá te espero listito para el choque!!!
1. Loquillo - Mi vida es una fiesta (Nueve Tragos, 2007)
Para las primeras horas de la contienda, yo todavía no arrocho. Soy como Loquillo, y más bien voy y me echo harto Barón Dandy en el cuello (que es ideal para cuando llegue la hora del chapetex) y saco del closet la mejor camisa y el casimir crema que me regaló mi ahijadito Duilio la navidad pasada. Siempre me ha gustado ser así, un man con clase, nada que ver con esos borrachos huachafos que abundan en mi trabajo. Luego sí que llegue el deshueve.
2. Eggs Over Easy - Party Party (Good 'N' Cheap, 1972)
Al rato me tocarán el timbre los muchachos de la Barra "U" Oriente, o también alguna choclona de mis amiguitas del estudio de abogados. Empieza el vacilón y este temasa de los no muy conocidos Eggs Over Easy (estandartes del llamado Pub Rock inglés) no puede faltar a volúmen de escándalo en todo el perímetro de mi departamento.
Igual nunca faltan los pelotas de mis amigos que en vez de deleitarse con los discos que pongo, agarran mis guitarras criollas para dizque levantarse una ñori......
3. Golpes Bajos - Fiesta de los maniquies (A Santa Compaña, 1984)
Oe flaca,¿Y si nos echamos una rayita y empezamos a mover la pelvis al son de Golpes Bajos?
Al final todo puede ponerse siempre más loco.
Siempre mucho mucho más loco!!
4. Rubén Rada - La fiesta del Rock ( La Rada, 1981)
Siempre que hago alguna celebración en casa, Rubén Rada es infaltable entre la música seleccionada. Es que, precisamente, este negro yorugua hermoso es la encarnación absoluta de sentirse chevere. La alegría de estar vivo brota con tanta naturalidad de la voz y el ritmo de Rada, que es definitivamente la mejor respuesta a ese cojudo o cojuda de turno (infaltables siempre) que se pasarán el resto de la velada pidiéndote algo "movido". Ponles a Rada, con esa irresistible mezcla de Candombe, Rock And Roll y Bossa Nova, y de frente diles que si no les convence, pues que se larguen ahí mismito a escuchar Radio Oasis o a ver un tributo a Bareto en el Toro Bar.
ESTA ES LA FIESTA DEL ROCK
THE BEAUTIFUL ROCK AND ROLL
NOBODY PUEDE DECIR
QUE NO ES FELIZ
SI ESTO ESTÁ A MIL!!!!!!
5. George Harrison - Party Seacombe (Wonderwall Music, 1968)
Este pendejo de la foto es mi pata "Lonchera de perro". Este causa, toda la vida hace que en mis fiestas la cosa se ponga en algún momento medio psicodélica. El conche', lo que es peor, trae en un maletincito su disfraz de hippie y se lo pone al son de este genial instrumental de George Harrison en algún momento de la juerga. Nunca conquista a ninguna de las féminas presentes con su onda, pero jura y rejura que la música lo atrapa y lo lleva hacia un viaje astral.
6. Pappo's Blues - Fiesta cervezal (Volumen 4, 1974)
Receta maestra del inmortal Pappo. Chelas y más chelas, para ir preparando el higado antes del ingreso triunfal de su infaltable majestad : El Carty.
7. Queen - Party (Miracle, 1989)
De todos los hijos de puta del Rock And Roll, Queen fue la agrupación que realizó las fiestas más bizarras, escandalosas e increíbles, tanto así que hasta el día de hoy siguen surgiendo leyendas sobre aquel mítico agasajo que brindaron por el lanzamiento de su precioso y maldito disco Jazz, el año de 1978 en un telo de Nueva Orleans. Enanos con bandejas de coca sobre sus cabecitas, travestidas musas y demás fenómenos de la naturaleza que a Mercury y compañía servían del mejor estímulo para tirar la casa por la ventana y celebrar, celebrar, celebrar y celebrar sin importar las consecuencias. Así que esta rola (de años posteriores) es dinamita pura para desbordarlo todo cuando el momento se presta.
Maestro, Freddie!!
8. Sam Cooke - Having a party (Live At The Harlem Square Club, 1963)
El momento ese en que los indeseables que pedían su bendita música "movida" ya quitaron cuerpo. Todos bailando satisfechos y extasiados al compás de la música que yo, el dj de ocasión, les pongo con sabiduría y sabor. Sam Cooke no pudo haber expresado mejor este momento de gloria absoluta que llego a experimentar yo, cuando mis invitados están felices con mi música, el traguito y la curichi.... digo, los piqueos.
Y si estás con tu costilla, mejor todavía.
9. Brownsville Station - Kings of the party (School Punks, 1974)
La eterna canción poderosa y absoluta que indica el inicio del descontrol con mis chocheras, y definitivamente no hay marcha atrás. Es la hora de dejar el apartamento y dirigirnos a la calle para hacer mierda la ciudad!
10. Los Prisioneros - Noche en la ciudad (Fiesta!) (Corazones, 1990)
Y esta canción de Los Prisioneros es definitivamente la lucidez de los delirantes y la ceguera de los "cuerdos". Yo me pregunto pues, por qué chucha y quién chucha estableció aquella tácita regla de que para ir de fiesta hay que esperar al fin de semana. Me cago en eso, señores. Me cago en su cuadriculada jornada que los hace acabar reprimidos e inquietos dentro de la cama al anochecer de un martes, cuando en realidad, bien que quisieran agitarse una poca. Vale ser feliz y celebrar el día que sea. Fuck 'em all.